CALMA MIA
Sé muy bien todo lo que sientes
pero tranquila, no voy a darte una despedida
yo los regalos, no los entrego sin más
me gusta darlos toda la vida

En cada vuelta puse la frente
paré los golpes, palpé la mala suerte
subí mil valles tras la montañaa
abrí la puerta, cerré la herida

Y suavemente intenté trazar sin éxito
no quedan cumbres en los desiertos eléctricos
en las mañanas no sopla brisa
hoy hasta al mar le falta la vida

Llegaron sueños, vinieron vidas
perdí un segundo con cada cara acontencida
pero luego lo pensamos más y qué
nunca supe sobrellevarlo y aún no sé

La única carta llegó partida
pensé que era un destructor el que escribía
con los balines haciendo diana el alma
ninguna rosa me ha pedido calma

Calma
la de tener por que hablarte
la de perder un instante
o darte toda mi vida

Calmar
la de echarte de menos hoy
la de escuchar que no tengo voz
la de perder o perder peor

Calma
la de ese mar que vimos los dos
la de temer que tendré temor
la de sentir que nunca estoy

Calma,
la de la callarme la boca
la de pegar dos tragos
y olvidar mucho mejor

Calma
no pronunciar más palabras
será el silencio la calma
será que yo ya no estoy

Calma
la de morir estos versos
y ver caer al poeta
que en mi nunca habitó